Congreso de Cambio Climático, Calidad Del Aire Y Salud en República Dominicana

Para poder aspirar a una población sana, debemos proteger las fuentes del agua que bebemos, el suelo que crece nuestro alimento y el aire que respiramos. La contaminación del aire es un problema global: 7 millones de muertes en el mundo son atribuibles a la contaminación del aire, según datos de la Organización Mundial de la Salud. La contaminación atmosférica es la segunda causa de muerte por enfermedades no transmisibles, después del tabaquismo.

 

En un esfuerzo por enfrentar los crecientes desafíos del cambio climático y su impacto en la salud pública, se llevó a cabo el Primer Congreso Internacional sobre Cambio Climático, Calidad del Aire y Salud en República Dominicana. Este congreso, organizado por los ministerios de Salud y Medio Ambiente junto con la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y  el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), tuvo como objetivo generar soluciones integrales bajo el lema “Aire limpio, comunidades sanas, bienestar para todos” y reunió a expertos y representantes de diversas organizaciones para intercambiar conocimientos.

Durante el evento, Rosa Urania de la OPS presentó el Plan Nacional de Adaptación de Salud al Cambio Climático (PNASCC). Esta iniciativa del Ministerio de Salud Pública, acompañados por la Fundación Plenitud en colaboración con la OPS, es una estrategia fundamental para mitigar los efectos del cambio climático en el sector salud. La maestra Laura Rathe, directora de la Fundación Plenitud, destacó que este plan es clave para adaptar las políticas del sector salud ante fenómenos climáticos extremos y el aumento de enfermedades, tanto transmitidas por vectores como no transmisibles. Rathe señaló también durante su presentación que “los niños son los más vulnerables ante la mala calidad del aire y tenemos la responsabilidad intergeneracional de revertir los daños que estamos dejando a las generaciones futuras”.

En el congreso se anunció la Declaración de Punta Cana, un compromiso entre los ministerios de Salud y Medio Ambiente para trabajar en conjunto en mejorar la calidad del aire y proteger la salud pública a través de políticas coordinadas. Parte de esta iniciativa incluye el fortalecimiento del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (SINAVE), que monitorea las enfermedades relacionadas con el cambio climático, como las enfermedades respiratorias y las transmitidas por vectores.

El cambio climático es problema de todos: proteger el medio ambiente es cuidar nuestra salud. Desde cada sector, seamos parte de la solución.

Share this post